Músicos de arpa y violín de Pantepec, Puebla
Leyendas:
Amocualli
El chivo
El Wila
La Llorona Xochiteca
Los Pollitos
Los Tatemactianis
De origen prehispánico, totonaco y náhuatl sierra de Veracruz y sierra de puebla la danza es un culto de la fertilidad dedicado al dios Xipetotec señor de la vegetación que renace cada primavera nahui ollin danza de cuatro movimientos en su rotación de la tierra en forma horizontal señalando en su vuelo los cuatro puntos cardinales que abarcan todo el universo y la mirada de los dioses como deidad central fundamento de la creación y dador de vida la entrada del nuevo sol y renovación del fuego.
Nuestra danza tiene connotaciones solares y cosmológicas también esta en conjunto con el movimiento, ollin (temblor o movimiento), así como la precisión de los cuatro puntos cardinales, la danza de los huahuas es una danza plegaria para solicitar al dios sol las bondades de la lluvia también es una acción de gracias por los dones recibidos durante las cosechas.
Su representación gráfica es la cruz de brazos iguales, la cruz mesoamericana y la imagen misma del universo; esta cruz se encuentra en el centro de la Piedra Solar llamada Calendario Azteca; es el Nahui Ollin ó Naollin. Los cuatro puntos y el centro se refieren a las cinco regiones en que aquellos pueblos concebían el universo:
El Norte, regido por Tezcatlipoca, por el color negro.La vestimenta consta de un pantalón de terciopelo rojo o azul, sobre él unos flecos de color dorado que representa los rayos del sol. Los danzantes también usan dos capas una de color rojo y otra azul a través del pecho, así como una sonaja, con la que acompañan el ritmo del complicado taconeo del baile
Esta danza se baila en la sierra Norte de Puebla y tiene un sentido agrícola astronómico, ya que los pasos, se ejecutan en cruz, como símbolo de los cuatro puntos cardinales, y en círculos, para significar la rotación del tiempo. Se piensa que el nombre viene del ave guacamaya o guagua y el vestuario pretende imitar la belleza del plumaje del pájaro.
El tocado de los danzantes es un armazón de carrizo por cuyos rayos están entretejidos cintas de papel o listones de varios colores. Cada rayo está rematado por plumas y borlas. El eje del círculo está sujeto a un gorro cónico que representa los colores de la naturaleza connotándose en el arcoíris en cada lluvia venidera.
La música se toca con una flauta de carrizo (acatlapitzalli) y tamborcillo (ueuetzintli) tocados ambos instrumentos por un solo hombre.
El simbolismo de esta danza es variado, tiene diferentes interpretaciones, según la población donde se baila es una versión del mundo y de la vida. Lo genérico es la representación ritual para que los campesinos que chapean o cortan caña de azúcar se protejan de la picadura mortal de las nauyacas, coralillos y cascabeles, serpientes venenosas que habitan en muchos lugares de la Sierra Norte, del Totonacapan y de la Huasteca poblana. También la danza lleva la intención de obtener el favor divino para lograr abundantes cosecha.
El origen de la danza de los Quetzales, data de tiempos remotos y lleva el nombre de un ave americana de extraordinaria belleza que no soporta el encierro y que cuando se ve aprisionada mueve sus alas inexorablemente; tal vez por ello es símbolo de libertad para algunas razas americanas.
En cuanto al nombre de la danza, Alessandro Lupo (1991:39) considera que proviene, no del pájaro así llamado, sino de la deformación de la palabra náhuatl cuezalot , que significa “llama” término con el que se designa al dios del fuego; por lo que, hay autores que consideran que esta danza formaba parte de las ceremonias vinculadas al culto solar.
Muchos pueblos de la zona se adjudican su paternidad. En algunos lugares le llaman Quetzalines; una variante es la danza de los Guaguas o Huahuas (los que poseen todo) o lakas (que en totonaco, tiene la misma connotación), quienes en determinado momento de la danza giran en una cruceta.
La danza no se baila para lucimiento; tampoco es un espectáculo. Su significado e intención es de tipo agrícola y tiene un profundo sentido religioso. Se ejecuta con el fin de pedir favores divinos, buen temporal, cosechas abundantes y, algo muy importante, salud. Los danzantes saludan a los cuatro puntos cardinales, para que los elementos naturales los protejan por todos los rumbos; piden al sol que los alumbre y haga germinar sus siembras.
Esta danza es religiosa, representa los tiempos en que Poncio Pilatos manda a matar a todos los primogénitos y según los danzantes mencionados, el Sr. Santiago Caballero es el que cuida al niño o gallinche, de los capitanes: Accharion, Sebario, Herodes, Escribano, Alberes Chanampis, y los capitanes Reales, comandados por Poncio Pilatos; personajes principales de la danza. La mayoría de las evoluciones ejecutadas en la danza son en fila y en hilera con pasos brincados, zapateados, giros y grandes desplazamientos.
El tema de la danza es narrativa, tiene “relaciones” donde hay relatos bíblicos, pero también es imitativa por que representan la pelea con diferentes personajes.
La música que se toca en la danza es con un tambor grande de cuero de cabra de 50 cms. de diámetro y la flauta es de carrizo grueso de 30 cms. de largo. Se baila principalmente en los municipios de Pantepec, Zacapoaxtla, Cuetzalan ,Xochitlan.
Es una danza considera como única en la región, es una danza que habla de la fertilidad, el cuidado del bosque, y la fraternidad con la naturaleza y esto es en torno al festejo del Santo Patrono San Mateo Apóstol que se celebra el 21 de septiembre.
Su indumentaria está compuesta por una banda azul que utilizan en el pecho que simboliza el cielo, la faja o pañoleta roja de la cintura simboliza la vida y en algunas ocasiones es de color rosado y representa lo terrenal, dando así la unión del cielo y la tierra.
El nombre paxtle o paste proviene de la palabra náhuatl para nombrar al heno, planta que crece sobre las ramas de encinos, por lo que estos danzantes representas a los árboles o troncos viejos que en temporada invernal se cubren de paxtle y los animales hacen su nido, de ahí que portan también animales disecados en la espalda como cacomixtles, ardillas y aves
El presente documental muestra como se viven las costumbres y tradiciones en San Miguel Tzinacapan, Puebla. En lo que es antes y durante la fiesta en Honor a San Miguel Arcangel, Santo Patrón del pueblo a quien con gran respeto, devoción, esfuerzo y fe los pobladores y sus alrededores se organizan para festejarle, de acuerdo a las tradiciones que los antepasados dejaron y que hasta el día de hoy han permanecido en su forma de pensamiento y desarrollo de origen Náhuatl. Miguel Tzinacapan cuenta con mayor grupo de de danzas autóctonas (Santiagos, Quetzales,Negritos, Voladores, Tokotines, Matarachines, Vegas, Españoles, Toreadores, Concheros, Migueles) organizados y representados por la propia comunidad, siendo estos muy valorados y sagrados por su entrega devocional al Santo Patrón del pueblo.
El mayordomo principal es el encargado de la Fiesta Patronal en servir solidariamente a San Miguel Arcángel y a su comunidad para que se cumpla un ciclo más de la renovación en la siembra, en el trabajo y en la vida espiritual del hombre. Acompañan también los mayordomos de las imágenes Santiago Caballero, San Rafael, San Gabriel, San Francisco y Arcángel Custodio, así como los diputados de cada uno, diputadas, familiares y los encargados de la flor de cucharilla. Por último las danzas de los Santiagos, Quetzales y Concheros brindan una aportación de su historia y participación en la Fiesta Patronal.
El interés del documental es contribuir con la comunidad, con la intención de que se siga comprendiendo que lo que identifica a un pueblo de los demás, son su identidad, raíces, costumbres formas de expresión y lenguaje. Se brinde respeto al trabajo de los investigadores que vivimos su fe y así sigamos acercándonos a toda la gente, sobre todo en dejarles legados de su lucha por el respeto y la dignidad del hombre que aún en sus formas humildes guardan tanto o más amor a todo lo que llamamos NATURALEZA VIVA.
Fabiola Jaramillo M.